Bastó que el Gobierno nacional anunciara que había llegado a un acuerdo con el centro de investigaciones epidemiológicas y microbiología Gamaleya para que la eterna grieta que divide a nuestro país se profundizara, si ello fuera posible. En el acto surgieron detractores y defensores de la gestión y nos convertimos todos en epidemiólogos opinando sobre la eficacia o no de la vacuna. Y una de las preguntas que primero surgió fue: ¿se trata de un procedimiento seguro o nos van a usar a los argentinos de conejillos de Indias? En ese sentido, desde Buenos Aires llegan algunas respuestas tranquilizadores. Lautaro de Vedia, ex presidente de la Sociedad Argentina de Epidemiología y jefe de Infectología del Hospital Muñiz no tiene dudas: “la gente debe quedarse tranquila. Nadie va a colocar una vacuna que no ha sido aprobada con estándares científicos y éticos”.
Argentina cerró un preacuerdo con Rusia, pero también los tiene con otros laboratorios, como AstraZeneca, Pfizer y el fondo Covax de la OPS. Pero además, como advierten los especialistas, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) debe aprobar el uso de estas vacunas, las que tienen que haber cumplido con pruebas clínicas y haber publicado los resultados.
Falta de información
De Vedia, en diálogo con LA GACETA aseguró que en el ámbito médico aún hay poca información sobre las vacunas. “Todavía no fueron publicados los datos de fase tres. Los médicos nos basamos en información oficial que sale publicada en las grandes revistas médicas, y eso todavía no lo tenemos. Pero siempre antes de utilizar una vacuna se hacen los informes correspondientes y estoy seguro que esta no será una excepción”. De Vedia fue más allá y aseguró que “nadie compra esa cantidad de vacunas sin que estén probadas. Debe haber una preinformacion. Sabemos que las tratativas las llevó adelante en forma personal la doctora (Carla) Vizzotti y ella es una eminencia en esto”. Justamente, ayer Vizzotti remarcó que “si la vacuna no es segura no se la vamos a dar ni a las personas de riesgo, ni esta, ni ninguna. No es que les vamos a dar a los que tienen factores de riesgo una vacuna menos segura y a alguien sano no se la daríamos”. Y aseguró que la vacuna no saldrá al mercado a menos que cumpla con todos los protocolos científicos.
Al respecto, De Vedia afirmó que la vacuna de Rusia es una de las que está en proceso, pero que además hay otros laboratorios a nivel mundial que están trabajando con lo mismo. “Se verá cuál es la de mayor eficacia, y además la de mejor acceso económico. Ante una compra de 25 millones de dosis ese es un punto muy importante a tener en cuenta”, indicó. Y reafirmó la importancia de la Anmat. “Por más que haya autoridades políticas que tomen decisiones, lo que vale es la autoridad regulatoria, en este caso la Administración Nacional, que es muy prestigiosa. Toda la investigación clínica tiene un enorme control científico y ético, donde se analiza si es razonable o no la colocación de las vacunas”. De Vedia advirtió que la vacuna no será para todos. “Se la colocará a los grupos de riesgo y al personal de salud. Se sigue el mismo razonamiento que con la vacuna contra la gripe: no es para todos”.